El 3 de Agosto de 1966 murió Leonard Alfred Schneider, más conocido como Lenny Bruce, un cómico que tuvo no pocos problemas con la justicia por el lenguaje obsceno que utilizaba en sus actuaciones.
Era un cómico mediocre, que apenas malvivía actuando en clubs de "stand up comedy", hasta que decidió nombrar a las cosas por su nombre, sacar a la luz todo lo que la gente esconde, afrontar los tabúes con naturalidad, el sexo, el racismo, la religión, la política, todo lo que nos vuelve vulnerables fue utilizado por Lenny en sus actuaciones, consiguiendo escandalizar a su público burgués, remover las conciencias puritanas, encoger los estómagos más sensibles, dejar al descubierto una sociedad hipócrita. Defendía el derecho a consumir drogas, decía que los homosexuales no debían ser perseguidos por la ley, que el sexo no era sucio, que los hombres de Dios debían predicar con el ejemplo y vivir austeramente, etc. etc. Y, por supuesto, su éxito tuvo un coste, ya que empezaron a acosarlo con denuncias por escándalo público. La primera vez, en septiembre de 1961, fue detenido por decir la palabra "chupapollas". Al principio, debió parecerle incluso divertido, más teniendo en cuenta que fue absuelto en ese primer juicio y que aquello le reportó una importante popularidad. Pero a un arresto le siguió otro. Lenny comenzó a hablar de sus juicios en sus espectáculos, con desparpajo, con irreverencia. Pero las detenciones se repitieron cada vez con mayor frecuencia. La policía vigilaba sus actuaciones. Y la situación acabó desbordándolo.
Aunque aquel acoso judicial le dio un sentido a su vida, llegando a considerarse un artista satírico que pretendía denunciar la hipocresía que imperaba en la sociedad americana, vaciar a las palabras de su sentido escandaloso a fuerza de repetirlas, gritarlas en voz alta, también acabó desgastándolo, abocándolo a la ayuda de drogas para enfrentarse al día a día.
Los juicios lo dejaron en la quiebra total. Sus actuaciones se volvieron desesperadas, caóticas y patéticas.
Fue una sobredosis de heroína lo que acabó con su vida. Tenía 40 años.
Bob Fosse filmó una película sobre Lenny Bruce en 1974, defensor de la libertad de expresión, mártir de estúpidas y represivas leyes que pretenden legislar hasta los aspectos más íntimos de las personas, llegando en su intento a caer en el ridículo y el absurdo. El papel principal fue interpretado por Dustin Hoffman, que desarrolla una interpretación brillante, secundado también de modo impecable por Valerie Perrine en el papel de Honey, la bailarina de streap-tease con quien se casó Lenny Bruce y tuvo una hija. La película está rodada en un luminoso blanco y negro, de los que resaltan el humo de los cigarrillos y los focos del escenario, con una impecable fotografía a cargo de Bruce Surtees.
La cinta transcurre como una mezcla entre el biopic y el documental, con un montaje que intercala el testimonio directo de los personajes con los hechos y, sobre todo, con actuaciones del protagonista ligadas al momento que se nos va narrando.
La película obtuvo seis nominaciones a los Oscar: Mejor Actor, Mejor Actriz, Mejor Fotografía, Mejor Guión Adaptado, Mejor Director y Mejor Película. No ganó ninguno.
Aunque el film tiene sus detractores, yo creo que es una película a reivindicar, y más en estos tiempos en que el puritanismo más recalcitrante vuelve a planear amenazador, especialmente en EEUU, donde la exhibición de un pecho femenino provoca una crisis nacional de proporciones caricaturescas.
14 comentarios:
Un link curioso sobre este personaje (en Internet esta TODO,aunque no se sepa su fiabilidad)
Es la ficha policial de Lenny http://www.fadetoblack.com/foi/lennybruce/fbifile.htm
Saludos
Una película genial. Fue una pena que Lenny emprendiera el camino de Diógenes, pero se quedara a la mitad, imagino que por la presión del acoso que sufrió y porque tal vez su postura más que buscar la belleza de la esencia desnuda del ser humano, buscaba la fama y con ello no pudiera despojarse de su propia hipocresía.
Un saludo cordial
Hannah
Comienza a ser imprescindible revisar ciertas películas, releer ciertos libros, recuperar nuestro espíritu de aquella época, para que no se crea que por estar callados nos hemos vuelto tontos (y no más sabios)
Un saludo
Qué bueno que me la recuerdas!
Efectivamente, la película es importante volver a verla.
Así que lo haré de nuevo como otras que son buenas.
(Yo nací el día que él murió, pero este dato es aquí entre nos...eh? jajaja...)
Lenny perdió credibilidad cuando se transformó de persona en personaje.
Sí, fué un grano en el culo. Hasta se le puede reconocer que creó escuela con la explosión del fenómeno showman y el monologuista, quizás no tan caústicos, pero que han hecho su papel como moscas cojoneras de las administraciones más palurdas y retrógradas de Estados Unidos.
últimamente me estoy encontrando con muchas cosas que desconocía: libros fantásticos, películas interesantes, parafilias nuevas... ahora mismo cargo la mula con esto (ups, digo, esto... la bolsa de la compra, claro, en la Fnac)
Acá en Chile, hay un escritor que se llama Luis López-Aliaga, que escribió una nouvelle basada en la vida de Bruce, de una vertiginosidad y precisión notable. El libro donde aparece la nouvelle se llama "Bazar imperio" y la nouvelle se llama "Tras el legado de Jackie Polino".
Saludos.
¿Qué es una "nouvelle"?
Por lo que se puede concluir por la película de Fosse y por los fragmentos que de los monólogos de Bruce aparecen en Submundo de DeLillo, da la sensación de que el "cómico" era simplemente un provocador. La película me pareció fascinante precisamente por mostrar esa vacuidad del discurso de Bruce que acabó llevándole a un triste patetismo.
Pero supongo que es injusto juzgar una obra, la de Bruce, por lo que otro nos cuenta. Y más cuando se trata de algo circunscrito a un tiempo perticular y a un país concreto, a una realidad que en muchos aspectos nos es ajena, los EEUU de los sesenta.
Un saludo
Ojo-Ojo, gracias por el enlace.
Hannah, bienvenida. Me parece interesante lo que dices. Sí, quizá Lenny deja al descubierto su propia hipocresía porque lo que realmente andaba buscando era el éxito. Pero bueno, al final, adquirió un roll importante y lo defendió hasta llegar a la propia autodestrucción.
Alexandrós, efectivamente. Hay que revisar las buenas películas. Hemos de intentar bajarnos de la carrera vertiginosa que nos imponen las modas.
Clarice, pues yo nací cuatro años antes, en 1962, pero tampoco lo cuentes por ahí.
Alicia, de acuerdo, en cierto modo coincides con Hannah, y es posible que tengáis razón. Sin embargo, ¿no es importante lo que se deja al descubierto? Me parece importante llegar a convertirse en mosca cojonera. Aunque sea algo que no puedas poner en el carnet de identidad ¿no?
"Nouvelle" suele ser un modo de denominar a la novela corta.
Anilibis, pues si la ves ya me contarás qué te parece.
Diego, gracias por el dato. Intentaré buscar ese libro. Suena muy interesante.
Gracias a todos por los comentarios.
Portnoy, no he léído "Submundo" y no sabía que ahí aparecían fragmentos de los monólogos de Lenny Bruce.
Aunque sea injusto, a veces no tenemos otra forma de conocer una obra más que a través de lo que otro nos cuenta.
No te contesté antes porque debimos cruzarnos.
Un saludo.
Reivindicar a gente como Lenny me parece necesario a mí también en este tiempo en que lo más evidente ya no resulta evidente y en que la mentira campa a su anchas, como si fuera la verdad.
Francisco Ortiz, siempre hacen falta voces críticas que nos ayuden a ver el revés de las cosas.
Un saludo.
Publicar un comentario