martes, abril 24, 2007

Esperando al enemigo


Gonzalo Calcedo nació en 1961, en Palencia, y reside en Santander. Ha publicado varios libros de relatos y ha obtenido importantes premios. "Esperando al enemigo" fue su primer libro. Reúne relatos en los que aparentemente no pasa nada, retazos de vidas anodinas, historias de motel, conversaciones en la oscuridad, carreteras que no llegan a ninguna parte; relatos que transmiten el mismo sentimiento que cuando observamos las ventanas iluminadas de los edificios en mitad de la noche. Y, sin embargo, transmiten soledad y vacío. Así, en "Hombres con armas", nos encontramos con Mel y Emma, una pareja que ha tenido que pasar la noche en un hotel de carretera porque se les ha estropeado el coche. Viajaban a visitar a la hermana de Emma, que se encuentra agonizando. Desde la habitación llega el sonido de unos disparos que aterrorizan a Emma. Mel sale de la habitación en busca del mecánico y encuentra al autor de los disparos: el encargado de recepción, está practicando puntería contra una puerta. Le ofrece a Mel la oportunidad de disparar y éste la acepta. Luego se ponen a charlar y a tomar café. Cuando por fin regresa a la habitación, ella le reprocha que haya tardado tanto y le dice que "ése loco ha estado disparando todo el rato". Pero él no le dice nada. Su conversación es vacía. Comprendemos de pronto que Mel querría quedarse en aquel lugar, quizá porque es un sitio que a ella le horroriza. En el mejor estilo carveriano, el relato se centra en unas horas de la vida de una pareja, en un acontecimiento nimio que, sin embargo, encierra todas las claves para comprender que el matrimonio de Mel y Emma está acabado. Podría hablar de cualquier otro relato, todos magníficos, como “La temporada próxima” o “La nieve tiene la culpa” o el propio “Esperando al enemigo”, pero resistiré la tentación para no desvelar demasiado. Sólo diré que todos ellos son extractos de situaciones, cortadas con un fino bisturí para abrirlas y dejarnos vislumbrar lo que se esconde en su interior.

Gonzalo Calcedo no puede negar la influencia americana, así que la pone de manifiesto en la cita que abre el libro. Una cita de John Cheever:
…y Bascomb depositó la medalla de Lérmontov a los pies del ángel. A continuación se arrodillo y dijo en voz alta:
—Dios bendiga a Walt Whitman. Dios bendiga a Hart Crane. Dios bendiga a William Faulkner, a Scott Fitzgerald y especialmente a Ernest Hemingway.

Calcedo adopta la tradición americana, el realismo sucio, y lo reproduce a la perfección. Sus paisajes son americanos y sus protagonistas también. Los temas de las historias, los asuntos solapados bajo la excusa de los viajes: las familias rotas, la soledad, la vacuidad de la existencia, son asuntos universales, que nos conciernen a todos.
Sus historias han recibido los más importantes premios literarios. Sus últimos libros han sido: “El peso en gramos de los colibríes” (Castalia), “La carga de la brigada ligera” (Menoscuarto) y “Saqueos del corazón” (Algaida).

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Un gran cuentista (aunque el último libro, el de saqueos, me parece que está por debajo de las cotas que solía alcanzar).

Clarice Baricco dijo...

Otro que no he leído.
Cuánto me falta, cuànto!
Bien contado y lo apunto.

Beso

la luz tenue dijo...

De todos los de Calcedo que he leído, el libro que más me gusta es "La madurez de las nubes". Y de éste, el primer cuento, "Plantas en el salón", que siempre me pareció tristísimo. En él la soledad del protagonista se puede tocar.

Anónimo dijo...

Es tan exacto tu comentario que me "imagino" muy bien el tipo de cuentos. Que por cierto, son de los que prefiero. Esta edición debe llegar acá. Su demás obra no ha llegado. Habrá que comprarlo.

Miguel Sanfeliu dijo...

M, no he leído el último libro, pero si tú lo dices, será verdad.

Clarice, es un autor interesante.

Luz tenue, buscaré "La madurez de las nubes". Éste tampoco lo he leído. Me interesa la recomendación.

José Romero, supongo que lo más práctico es comprarlo por internet, cosa que yo, por otra parte, no suelo hacer, aunque me doy cuenta de que debo empezar a utilizar internet para comprar productos que cuesta encontrar en las tiendas.

Saludos y gracias por los comentarios.

Francisco Ortiz dijo...

Uno de esos tipos más interesantes e importantes de lo que su nombre indica. Has hecho muy bien en crearle un post.