1.- ¿Por qué escribes?
Porque desde pequeña me ha gustado
leer y, al final, he desarrollado mi propia voz.
2.- ¿Cuáles son tus costumbres,
preferencias, supersticiones o manías a la hora de escribir?
Al trabajar a primera hora de la
mañana, tengo la creencia que los textos son más lúcidos estilísticamente. Al
trabajar por la noche, tengo la creencia que adquieren mayor creatividad en
ideas y contenido. Al final todo queda en trabajar los textos cada día sea
cuando sea sí o sí.
3.- ¿Cuáles dirías que son tus
preocupaciones temáticas?
Las rarezas de la psicología humana en
la interacción con los otros o en situaciones de conflicto. Nuestra época actual
con su sistema opresor acomodado en la cotidianidad y sus movimientos
socioculturales, reivindicaciones y cambios. Las inquietudes y el fracaso de
expectativas.
4.- ¿Algún principio o consejo
que tengas muy presente a la hora de escribir?
Escribir, sea lo que sea. Luego, si
no es bueno, ya lo descartarás o reescribirás.
5.- ¿Eres de las que se deja llevar
por la historia o de las que lo tienen todo planificado desde el principio?
Planificado, aunque conozco más
matices sobre la historia y sus personajes al desarrollarlos por extenso.
6.- ¿Cuáles son tus autores o libros
de cabecera?
No son los mismos los que me han
impulsado a escribir (Ann Beattie, Richard Yates o autores de la ALT-LIT como
Tao Lin o Noah Ciceró) a los que han afectado mi modo de ser y mis temas
(Dostoyevski, Nabokov, Lessing, Bolaño, Foster Wallace, Mary Shelley,
Danielewski o Vonnegut)
7.- ¿Podrías hablarnos de tu último
proyecto? Bien lo último que hayas publicado o lo último que hayas escrito o
estés escribiendo.
Había una fiesta es mi primera novela y último libro publicado. Es una exploración del trauma originado por distintos sustratos machistas establecidos como cotidianos; capas y capas de pensamiento asentado que llevan al drama de algo mucho más violento. Es también la historia de aquello que redime el trauma patriarcal: la amistad entre mujeres. Todo ello en un marco falsamente festivo y vacacional de adolescencia millennial.
Actualmente trabajo en mi segunda novela, algo más ambiciosa, que tratará la confrontación en el mundo cultural cuando divergen las percepciones sobre qué es ser exitoso.
Marina L. Riudoms (Barcelona, 1983) ha pasado su vida entre
libros, ya sea desde el sector editorial —ha trabajado para Génat, Jose Juan
Olañeta y Penguin Random House— como desde el periodismo —escribiendo para Revista Lateral, La tribu o PlayGround, y
editando en NOIR Magazine—. Aunque
también se ha dedicado a la escritura literaria desde que tiene uso de razón,
no es hasta ahora que se ha atrevido a dar el gran salto: Había una fiesta es
su primera novela.
Había una fiesta es mi primera novela y último libro publicado. Es una exploración del trauma originado por distintos sustratos machistas establecidos como cotidianos; capas y capas de pensamiento asentado que llevan al drama de algo mucho más violento. Es también la historia de aquello que redime el trauma patriarcal: la amistad entre mujeres. Todo ello en un marco falsamente festivo y vacacional de adolescencia millennial.
Actualmente trabajo en mi segunda novela, algo más ambiciosa, que tratará la confrontación en el mundo cultural cuando divergen las percepciones sobre qué es ser exitoso.
No hay comentarios:
Publicar un comentario